La Alianza Cristiana Dominicana rechaza categóricamente la introducción de los párrafos presentados por ciertos sectores legislativos que buscan endurecer las penas por el aborto, afectando de manera directa a las tres causales que históricamente han protegido la vida, la dignidad y los derechos fundamentales de las mujeres dominicanas. Defensa de la Dignidad y los Derechos Humanos de la Mujer Nuestra posición se fundamenta en el imperativo ético y jurídico de garantizar que cada mujer tenga el derecho a decidir sobre su propio cuerpo en situaciones de extrema vulnerabilidad. Los instrumentos internacionales de derechos humanos, junto con la Constitución de la República Dominicana, consagra el respeto a la integridad física y psíquica, y la protección contra cualquier forma de violencia o coerción que menoscabe la dignidad humana.
En este sentido, la imposición de sanciones desproporcionadas vulnera los principios de justicia, equidad y compasión que deben regir la labor del Estado en la protección de sus ciudadanos. Argumento Bíblico-Teológico a Favor de las Tres Causales.
La enseñanza cristiana, lejos de promover una visión intransigente y punitiva, convoca a la misericordia, al amor incondicional y a la protección de los más vulnerables. Así lo evidencia el mandato del Evangelio de amar al prójimo como a uno mismo y de actuar con compasión ante el sufrimiento humano. Como señala claramente Mateo 9.13: "Misericordia quiero, y no sacrificios".
La Sagrada Escritura nos recuerda en numerosos pasajes la importancia de la empatía y el cuidado, exhortándonos a no juzgar precipitadamente, sino a brindar un acompañamiento solidario en momentos de angustia (Mateo 7.1; Gálatas 6.2; Romanos 12.15). - En situaciones donde la vida de la madre se ve amenazada, donde la consecuencia de una violación o la detección de anomalías que ponen en riesgo el bienestar integral se hacen evidentes, es imperativo adoptar una postura que privilegie el amor y la comprensión por encima de una letra de la ley que ignora la complejidad del ser humano. -
La vida es un don divino, pero no puede ser reducida a un precepto legal que, al imponer castigos desmedidos, se convierta en instrumento de opresión y de violación de la libertad y dignidad de la mujer. (Juan 8:7) Una Llamada a la Reflexión y al Diálogo Resulta imprescindible que el debate legislativo se lleve a cabo en un marco de respeto, diálogo y profunda reflexión sobre las implicaciones humanitarias y teológicas de estas medidas.
La Alianza Cristiana Dominicana aboga por una legislación que no criminalice el dolor ni castigue a quienes se encuentran en situaciones de extremo sufrimiento, sino que ofrezca respuestas integrales, basadas en la justicia restaurativa, la empatía y la asistencia a la mujer en su camino hacia la sanación y la dignidad.
“En este contexto, rechazamos enérgicamente estos párrafos que, en lugar de contribuir al bien común, generan un clima de exclusión y violencia simbólica que afecta tanto a la mujer como al tejido social dominicano. Invitamos a todos los sectores de la sociedad a sumarse a este llamado a la reflexión y a construir una normativa que respete la vida en todas sus dimensiones, honrando la esencia del amor y la compasión que nos dicta la fe cristiana y los principios universales de los derechos humanos. Por una República Dominicana justa, solidaria y respetuosa de la dignidad de la mujer”.