El cierre parcial del Gobierno de Estados Unidosalcanzó este domingo 40 días consecutivos sin que el Senado logre un acuerdo que permita la reapertura de las agencias federales.
Las negociaciones se mantienen estancadas, con discrepancias sobre el presupuesto y los subsidios de salud como ejes centrales de la disputa, mientras continúan los efectos en salarios públicos, vuelos, asistencia alimentaria y otros servicios esenciales.
Desacuerdo por subsidios de salud frena negociaciones
El principal punto de fricción sigue siendo la extensión por un año de los subsidios del Affordable Care Act (Obamacare), exigencia del Partido Demócrata, que busca evitar un incremento en los costos de seguros médicos para millones de ciudadanos.
Los republicanos, por su parte, han rechazado incluir esa prórroga en un acuerdo de financiación inmediata, argumentando que debe discutirse por separado. Las conversaciones del fin de semana no lograron avances decisivos para destrabar el impasselegislativo.
Propuestas temporales y presiones políticas
El líder de la mayoría republicana en el Senado, John Thune, dijo que están “a pocos votos” de impulsar un proyecto para financiar parcialmente al Gobiernohasta enero y asegurar recursos para algunos programas, pero sin apoyo demócrata garantizado.
Paralelamente, senadores moderados de ambos partidos exploran un paquete bipartidista que restablecería fondos para asistencia alimentaria, atención a veteranos y el Congreso, con una extensión temporal del resto del presupuesto, a cambio de debatir luego los subsidios sanitarios.
El presidente Donald Trump ha descartado apoyar la prórroga de esos beneficios y llamó nuevamente a los republicanos a eliminar el filibusterismo en el Senado, norma que exige 60 votos para aprobar la mayoría de las iniciativas. También el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, descartó llevar a votación la extensión de los subsidios.
El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, advirtió que la falta de acuerdos podría generar “consecuencias devastadoras”, incluyendo pérdida de seguro médico y dificultades económicas. Este cierre se perfila como uno de los más prolongados en la historia reciente del país.










