En un hecho sin precedentes para la Iglesia Católica, el cardenal Robert Francis Prevost ha sido elegido este jueves como el nuevo Papa, adoptando el nombre de León XIV, y convirtiéndose en el primer pontífice originario de los Estados Unidos. Su elección añade una nueva página a la historia de los cónclaves celebrados en el mes de mayo, un evento poco habitual en los más de dos mil años de tradición eclesiástica.
Con la elección de León XIV, ya son tres los Papas escogidos en mayo a lo largo de la historia. El primero fue en 1342, durante el llamado cautiverio de Aviñón, cuando el cardenal Pierre Roger fue elegido como Clemente VI. Su pontificado destacó por su mecenazgo cultural, su activismo diplomático y la adquisición de Aviñón como propiedad de la Santa Sede.
El segundo ocurrió en 1605, cuando tras 27 votaciones, el cardenal Camillo Borghese fue elegido como Pablo V. Su liderazgo coincidió con el auge de la Contrarreforma, consolidando tanto el poder espiritual como el temporal del papado.
Ahora, en 2025, el cónclave ha vuelto a marcar un hito con la designación de Robert Francis Prevost, agustino, ex misionero en Perú, políglota —habla inglés, español e italiano— y cercano al pensamiento del Papa Francisco, especialmente en su compromiso con los más desfavorecidos y los migrantes.
El nuevo Papa León XIV asume el trono de San Pedro con una visión de continuidad en temas sociales y una marcada sensibilidad pastoral, en un mundo necesitado de diálogo, justicia y esperanza.
