Cuatro hombres fueron condenados a 10 años de prisión por el robo de un cajero automático instalado en una estación de expendio de combustibles, en un hecho ocurrido el 29 de mayo del 2022, en el sector Bajos de Haina, San Cristóbal.
Los acusados son: Gabriel Octavio Yambatis Féliz, Gregorio de la Cruz, Juan Ramón Montás Petiton y Rafael Sánchez Guzmán.
De acuerdo con una nota de prensa del MP, para cometer el robo del cajero automático, del cual lograron tomar tres millones novecientos setenta y tres mil ochocientos pesos (RD$3,973,800), los cuatro procesados se asociaron con Gabriel Marte Polanco, Carlos José García Martínez, Rubi Starly Salvador Moore, Alexander Monegro, José Almando Eduardo Díaz, Joel Toribio Martínez y otro malhechor identificado como Elvis, quien se encuentra prófugo.
Posteriormente, Sánchez Guzmán y Toribio Martínez, quienes trabajaban para la entidad financiera propietaria del cajero, se presentaron al lugar ubicado en la avenida 6 de Noviembre, en compañía de un técnico que estaba encargado de reparar el cajero para que pudiera ser utilizado por los usuarios.
En ese momento Sánchez Guzmán y Toribio Martínez, violando las normas de seguridad de la entidad financiera, dejaron del lado equivocado los cajones del dinero del cajero.
Tras colocar el dinero en la posición más cómoda para ejecutar el robo, Sánchez Guzmán salió del local donde el técnico arreglaba el cajero automático y realizó una llamada, acto seguido al lugar se presentaron, con armas de fuego, Montás Petiton, Yambatis Féliz y Eduardo Díaz, quienes tomaron el dinero y emprendieron la huida a bordo de una yipeta marca Honda CRV, de color gris, la cual era conducida por De la Cruz.
Al marcharse del lugar, los malhechores fueron seguidos en un vehículo marca Honda CRV de color rojo por Marte Polanco, quien se había quedado en la carretera con la finalidad de vigilar el área mientras estos efectuaban el robo del cajero.
En su recorrido, los delincuentes se desplazaron hasta un solar baldío en Haina, donde abandonaron la yipeta Honda CRV, de color gris y se marcharon en una Nissan, color blanco, propiedad de la esposa de De la Cruz, hasta un motel en el que se reunieron con Monegro, quien se encargó de distribuir el dinero entre los implicados.
El órgano persecutor del delito demostró que las acciones cometidas por los procesados constituyen una violación a los artículos 59, 60, 265, 266, 379 y 384 del Código Penal Dominicano, que castiga la asociación de malhechores para cometer un delito y el robo.
En su accionar los malhechores también faltaron a las disposiciones de los artículos 66 y 67 párrafo v de la ley 631-16, sobre el uso de armas y materiales relacionados.
Por decisión del Tribunal Colegiado de la jurisdicción de San Cristóbal, que integran las juezas Rosa Edalia Mateo, Ana Inés Susana y Biúlkis Milanés, los procesados cumplirán la condena en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres.
