Agencia EFE-Rusia podría estar preparando un nuevo ataque contra Ucrania utilizando el misil experimental Oreshnik en los próximos días, según informó un funcionario estadounidense este miércoles, bajo condición de anonimato.
El misil Oreshnik, que Moscú empleó por primera vez el 21 de noviembre contra la ciudad de Dnipro con una ojiva convencional, tiene la capacidad de atacar objetivos a varios miles de kilómetros de distancia, con la posibilidad de llevar ojivas nucleares. El funcionario indicó que, aunque la utilización de este misil podría generar temor en Ucrania y sus aliados, es poco probable que cambie el curso del conflicto debido a su capacidad limitada y su disponibilidad reducida.
“Rusia ha señalado su intención de lanzar otro misil Oreshnik contra Ucrania, potencialmente en los próximos días”, señaló la fuente, quien también destacó que el objetivo de estos ataques no es tanto alterar la dinámica en el campo de batalla, sino más bien intimidar a Ucrania y sus aliados.
A pesar de los temores generados por el misil, otro funcionario estadounidense intentó moderar la preocupación al indicar que "Rusia probablemente solo tenga un puñado de estos misiles experimentales", lo que sugiere que su uso podría no ser frecuente.
El presidente ruso, Vladimir Putin, defendió el ataque de noviembre como una represalia por los recientes lanzamientos de misiles ucranianos contra territorio ruso, especialmente aquellos suministrados por Estados Unidos y el Reino Unido. Durante una declaración el pasado viernes, Putin amenazó con continuar sus ataques, señalando específicamente los "centros de decisión" en Kiev, la capital de Ucrania.
Además, Putin dejó entrever la posibilidad de desplegar misiles Oreshnik en Bielorrusia, aliado cercano de Moscú, lo que incrementaría la proximidad de los ataques a la capital ucraniana, situada a solo 100 kilómetros de la frontera bielorrusa.
La noticia ha generado gran preocupación en Ucrania, donde la población, especialmente en áreas cercanas a los puntos de lanzamiento potenciales, ha vuelto a buscar refugio en los refugios antiaéreos cuando suena la alarma. El temor a nuevos ataques ha reavivado las tensiones, ya que se teme que el uso del Oreshnik pueda intensificar aún más el conflicto en la región.