María Teresa Fabián, empleada doméstica de la señora Yolanda Handal Abugabir, narró uno de los momentos más angustiantes del ataque ocurrido el pasado 23 de julio en el residencial Naco Dorado IV, donde varias personas resultaron heridas y una mujer, su empleadora, perdió la vida.
Todo comenzó cuando María Teresa abrió la puerta del apartamento por instrucción de su jefa. Del otro lado la esperaba el joven Jean Andrés Pumarol armado con dos cuchillos, que sin mediar palabra la agredió brutalmente. “Me entró a cuchillazo por varias partes de mi cuerpo, me tiró al piso. Traté de refugiarme con una almohada, pero él seguía tirándome”, relató ante el Ministerio Público.
En medio del caos, la trabajadora también fue testigo del momento en que el agresor arremetió contra la mascota de la casa, una pequeña perrita, a la que le quitó la vida antes de dirigirse hacia la señora Handal, quien fue atacada poco después, perdiendo la vida.
Este domingo, la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional aplazó, por segunda ocasión, la audiencia en la que se decidirá la medida de coerción que se impondrá a Jean Andrés Pumarol, acusado de un ataque el pasado miércoles en un edificio residencial en el ensanche Naco, en la capital, que dejó una persona muerta y cinco heridas.
La audiencia fue pospuesta para mañana lunes a las 9 de la mañana tras la decisión del tribunal para que una de las víctimas tenga conocimiento del expediente acusatorio.
La vista inicialmente fue programada para el pasado viernes pero fue pospuesta para este domingo y reprogramada para mañana.
El Ministerio Público ha solicitado prisión preventiva contra Pumarol Fernández, de 30 años, cuya familia asegura que es paciente psiquiátrico desde hace años.
En el ataque, con un cuchillo, el joven provocó la muerte de Yolanda Hadal, de 70 años, de acuerdo con la Policía Nacional.
Pumarol Fernández también hirió a su padre, Guillermo Pumarol, de 62 años; así como a Teresa Fabián Heredia, de 70 años; Francisco Texano, de 68; Griselda Ozuna, de 48; y a Victoria Heredia, de 36.
