Yordy Cabrera, el entrenador acusado de presuntamente inyectar a pelotero con medicamento veterinario y causarle la muerte, se desligó totalmente del caso que se le señala. Al tiempo que lamentó el fallecimiento del pelotero, Ismael Ureña Pérez.
“Se me ha estado acusando y es visto en las redes que se ha mencionado mi nombre cosa que yo no tengo nada en lo absoluto que ver con eso, donde dicen que supuestamente le he inyectado sustancia de caballos a un joven fallecido, lo cual lamento mucho que haya sucedido, porque yo soy padre, pero yo no tengo ver nada con esa pérdida”, detalló Cabrera a través de audiovisual.
Asimismo, dijo que no ha amenazado a los familiares del joven fallecido como se ha estado divulgado, asegura que es un hombre cristiano y que no se prestaría para eso.
Señaló que cuenta con poco más de cinco años con su academia y la misma tiene ya unas cinco firmas para el profesionalismo.
De igual forma, indicó que a todos los jugadores que tiene en la academia les hicieron dopajes y pudieron asistir a jugar una liga de verano.
Abogados de la familia Ureña Pérez
De su lado, Aracena, presidente de la Fundación Familia Sin Violencia, y quien es el abogado apoderado de la familia Ureña Pérez, expresó que ya solicitaron medida de coerción para Cabrera.
También solicitaron ante el Departamento de Derechos Humanos y reinserción de repatriados de la Procuraduría de la República, la intervención de las academias de béisbol para niños aspirantes a peloteros.
