Santo Domingo.– En el marco del Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, organizaciones de la sociedad civil han encendido las alarmas sobre la persistencia de serias desigualdades que afectan el acceso de las mujeres —dominicanas y migrantes— a servicios de salud adecuados en República Dominicana.
Según cifras preliminares del Ministerio de Salud Pública correspondientes a 2024, el país ha registrado 180 muertes maternas, lo que representa una alarmante tasa de 125 por cada 100,000 nacidos vivos. Este número supera ampliamente el promedio regional para América Latina y el Caribe, que se sitúa en 77 por cada 100,000.
Del total de muertes, 94 corresponden a mujeres dominicanas, mientras que 86 afectaron a mujeres haitianas o dominicanas de ascendencia haitiana, lo que, de acuerdo con las organizaciones, pone en evidencia la dimensión racial y migratoria de la crisis.
Uno de los casos que ha causado mayor indignación es el de Lourdia Jean Pierre, una mujer haitiana que falleció el pasado 9 de mayo al dar a luz en su hogar, presuntamente por temor a ser detenida y deportada si acudía a un centro de salud. El caso ha sido denunciado como una consecuencia directa de la aplicación de políticas migratorias represivas que, según expertos legales, contravienen la legislación nacional.
Exigen acciones concretas
Las organizaciones sociales han presentado un pliego de demandas urgentes, entre las que se incluyen el cese inmediato de las deportaciones de mujeres embarazadas y en posparto desde centros de salud, así como la exclusión del personal de Migración en estos espacios. Igualmente, solicitan la implementación de políticas de salud sexual y reproductiva que garanticen el acceso a métodos anticonceptivos, servicios de aborto terapéutico y estrategias para reducir la mortalidad materna.
También han llamado al Ministerio de Salud Pública, al Colegio Médico Dominicano y a los gremios del sector a asumir un rol activo en la defensa de los derechos de las pacientes, sin importar su estatus migratorio.
Compromiso con la dignidad humana
Las agrupaciones firmantes, entre las que figuran CONAMUCA, CIPAF, MUDHA y el Foro Feminista Magaly Pineda, reiteraron su compromiso con la defensa de la dignidad y los derechos de las mujeres, haciendo un llamado a la ciudadanía, a los medios y a la comunidad internacional a mantenerse vigilantes frente a esta situación.
“La salud no puede seguir siendo un privilegio ni un riesgo para las mujeres en este país. Exigimos que se respeten las leyes y se pongan en marcha políticas públicas que garanticen la vida y el bienestar de todas las gestantes, sin discriminación”, concluye el comunicado conjunto.
