Santo Domingo– En una acción sin precedentes, la República Dominicana ha iniciado un proceso nacional de diálogo y concertación para diseñar una política de Estado frente a la prolongada crisis en Haití. El esfuerzo, articulado por el Consejo Económico y Social (CES) y respaldado por el presidente Luis Abinader, busca construir respuestas sólidas y consensuadas a los múltiples desafíos que plantea la situación en la nación vecina.
El proceso se destaca no solo por su alcance técnico y metodológico, sino también por reunir, por primera vez en años, a tres expresidentes de la República: Hipólito Mejía, Leonel Fernández y Danilo Medina, quienes participarán como actores claves en la construcción de acuerdos de largo plazo.
Un enfoque integral con seis áreas de trabajo
El diálogo nacional se desarrollará en seis mesas temáticas que abordarán de forma simultánea los principales ejes de impacto: migración, comercio bilateral, comunidades fronterizas, seguridad nacional, relaciones internacionales y asuntos laborales. Cada una contará con el acompañamiento de expertos, instituciones especializadas y representantes de distintos sectores sociales y económicos.
Los insumos que surjan de estas mesas, ya sean consensos o divergencias, se recopilarán como parte de un documento estratégico que será entregado al Poder Ejecutivo y a los expresidentes, como base para la toma de decisiones.
Inclusión ciudadana y de la diáspora
Una de las innovaciones más destacadas del proceso es la apertura de una plataforma digital de participación ciudadana, que permitirá a los dominicanos —tanto residentes como miembros de la diáspora— presentar propuestas, opiniones y documentos. Esta herramienta busca democratizar el proceso y legitimar aún más las políticas que emanen del mismo.
Un ejercicio democrático inédito
Rafael Toribio, presidente del CES, subrayó que este diálogo representa un modelo participativo sin precedentes en el país, donde prima el interés nacional sobre cualquier agenda política. La metodología general del proceso será presentada en los próximos días, junto con el cronograma de trabajo y los mecanismos de evaluación y seguimiento.
El lanzamiento de este diálogo coincide con el vigésimo aniversario del CES, reforzando su papel como órgano clave en la articulación de consensos entre el gobierno, el sector privado, los trabajadores y la sociedad civil.
Con este esfuerzo, la República Dominicana no solo busca proteger su estabilidad interna, sino también posicionarse como un actor responsable y estratégico ante una crisis regional que exige respuestas conjuntas y sostenidas.