Tras más de 12 horas de audiencia, la jueza Fátima Veloz impuso en la madrugada de este jueves medidas de coerción contra los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, imputados en el denominado caso Jet Set.
La magistrada del tribunal dictó una garantía económica de 50 millones de pesos, además de presentación periódica e impedimento de salida del país para ambos acusados, como parte del proceso judicial que se les sigue por presuntos vínculos con operaciones ilícitas relacionadas al conocido centro de entretenimiento.
El Ministerio Público había solicitado prisión preventiva, sin embargo, el tribunal optó por imponer medidas menos gravosas, tomando en cuenta las condiciones personales de los imputados y los elementos presentados por la defensa