La Junta Central Electoral (JCE) adjudicó al consorcio EMDOC el contrato para la implementación de la nueva cédula de identidad y electoral, un proceso que tendrá un costo aproximado para el país de RD$6,000 millones y que busca modernizar el documento con mayores niveles de seguridad y facilidades tecnológicas.
El consultor jurídico de la JCE, Denny Díaz Mordán, explicó que el proceso de licitación fue transparente y supervisado por una comisión técnica designada por el pleno del organismo, la cual evaluó las propuestas conforme al pliego de condiciones. En ese sentido, aclaró que los oferentes que quedaron fuera no cumplieron con los requisitos técnicos establecidos.
Díaz Mordán explicó que la licitación contemplaba una fase técnica obligatoria denominada “prueba de concepto”, en la que cada oferente debía demostrar con sus propios equipos la capacidad de producir una cédula con las características de seguridad exigidas en el pliego de condiciones.
Por su parte, el director nacional de Cedulación, Américo Rodríguez, destacó las innovaciones de la nueva cédula, entre ellas un material más resistente y la posibilidad de utilizarla para firmar digitalmente documentos, lo que la alinea con estándares internacionales.
Opiniones políticas encontradas
La decisión de la JCE generó reacciones diversas entre representantes de partidos políticos.
El delegado del PRM ante la Junta, Sigmund Freund, manifestó que su organización estuvo de acuerdo con el proceso y resaltó la importancia de la claridad con que se ejecutó.
Mientras que Javier Ubiera, delegado de la Fuerza del Pueblo, valoró positivamente la duración y los atributos de la nueva cédula, al considerar que se trata de un documento con mayor prolongación en su uso.
En tanto, Omar Liriano, dirigente de la Fuerza del Pueblo, destacó el trabajo que la JCE ha venido desarrollando en esta materia.
Desde la oposición, el vocero del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Gustavo Sánchez, cuestionó la pertinencia de la inversión, calificando de innecesarios los gastos en un momento de debilidades económicas del Estado. Señaló que la actual cédula mantiene niveles de seguridad suficientes para validar la identidad de los ciudadanos.
Con esta adjudicación, la JCE avanza hacia la puesta en marcha de una cédula más moderna y segura, aunque el debate político refleja visiones distintas sobre la necesidad y el costo del proyecto.
