Tan pronto como Biden puso fin abruptamente a su candidatura, Harris y su equipo trabajaron para asegurarse el apoyo de los 1.976 delegados del partido necesarios
La vicepresidenta Kamala Harris, una hija de inmigrantes que ascendió en los ámbitos político y policial de California hasta convertirse en la primera mujer en ocupar la vicepresidencia de Estados Unidos, aseguró el lunes la nominación presidencial del Partido Demócrata, convirtiéndose así en la primera mujer no blanca en ser postulada a la presidencia por alguno de los dos principales partidos.
Más de cuatro años después de que fracasara su primer intento de llegar a la presidencia, la coronación de Harris como abanderada de su partido pone fin a un periodo tumultuoso y frenético para los demócratas, provocado por la desastrosa actuación del presidente Joe Biden en el debate presidencial de junio, que acabó con la confianza de sus propios partidarios en sus posibilidades de reelección y desató una extraordinaria lucha dentro del partido sobre si debía seguir en la contienda.
Tan pronto como Biden puso fin abruptamente a su candidatura, Harris y su equipo trabajaron para asegurarse el apoyo de los 1.976 delegados del partido necesarios para conseguir la candidatura en una votación nominal formal. Una encuesta realizada por The Associated Press entre los delegados de todo el país mostró que Harris consiguió los compromisos necesarios tan sólo 32 horas después del anuncio de Biden.