Santo Domingo, Rep. Dom.- El Instituto Duartiano, a través de su presidente, el doctor Wilson Gómez Ramírez, manifestó su pleno respaldo a las recientes medidas adoptadas por el gobierno dominicano para controlar la inmigración irregular, especialmente la que proviene de Haití.
En un encuentro efectuado este lunes, en su sede del Museo y Casa de Duarte, en la Ciudad Colonial, Gómez Ramírez deploró las acusaciones provenientes de algunos sectores internacionales que, según afirmó, son impulsadas por intereses haitianos con el propósito de desprestigiar las políticas migratorias de la República Dominicana.
Según el presidente del Instituto Duartiano, las críticas contra las repatriaciones masivas de inmigrantes en situación irregular no reconocen los esfuerzos que, en todo momento, ha realizado el país en favor de Haití en momentos de crisis, "la República Dominicana ha ofrecido múltiples apoyos a la nación vecina, corresponde a la comunidad internacional asistir a Haití para que pueda hacer organizar su registro civil y sus procesos electorales, así como apoyar su fortalecimiento institucional ", enfatizó.
Gómez Ramírez señaló que el país se ha visto forzado a soportar una enorme presión sobre sus recursos económicos, particularmente en los sectores de salud y educación, debido al flujo constante de inmigrantes ilegales.
Subrayó que la situación migratoria afecta profundamente la estabilidad y la economía de la República Dominicana, y destacó la obligación del Estado de garantizar la integridad territorial y la paz social, “la economía nacional no puede seguir asumiendo los costos de una inmigración masiva y descontrolada”, declaró el presidente del Instituto Duartiano, añadiendo que las autoridades están actuando en defensa de los intereses supremos del país.
El Instituto Duartiano ha sido enfático en su respaldo a las iniciativas del gobierno para intensificar las repatriaciones, la entidad patriótica exhortó a las autoridades a seguir con el objetivo de repatriar al menos 10 mil inmigrantes ilegales por semana, en un esfuerzo por aliviar la presión sobre el presupuesto nacional, dijo.
Gómez Ramírez manifestó que, además, instó a un control más riguroso en las zonas de alta concentración de inmigrantes indocumentados, como Friusa, una comunidad en la región Este que ha sido un foco de atención debido a la gran cantidad de inmigrantes ilegales que residen allí.
También pidió un mayor esfuerzo por parte de las fuerzas de seguridad y del sistema judicial para combatir el tráfico de personas en la frontera, y exhortó a que se capture y sancione severamente a aquellos que se dedican al tráfico de indocumentados, sin importar su jerarquía o posición, toda vez que constituye un imperativo que los jueces actúen con firmeza, imponiendo sanciones ejemplares a los responsables de estos delitos que comprometen la soberanía y la estabilidad del país", añadió el presidente del Instituto.
Señaló que seguirán vigilantes en el seguimiento de estas políticas, que "nosotros, como guardianes de la obra de Juan Pablo Duarte, seremos veedores en la frontera para asegurar que las medidas se cumplan, y que las repatriaciones y el control de la inmigración continúen de acuerdo con los compromisos asumidos por las autoridades dominicanas", finalizó diciendo el doctor Wilson Gómez Ramírez.
Ve positiva retirada de la reforma fiscal y señala el incumplimiento en la exención de impuestos
El presidente del Instituto Duartiano, doctor Wilson Gómez Ramírez, calificó correcta la decisión del presidente de la República, Luis Abinader, de retirar el proyecto de modernización o reforma fiscal, que había generado una fuerte oposición por parte de diversos sectores de la sociedad.
El doctor Gómez Ramírez recordó que, según la ley de creación del Instituto Duartiano, la entidad está exenta de pagar impuestos, sin embargo, durante los últimos 23 años, la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) ha ignorado sistemáticamente esta disposición legal, lo que ha generado una serie de complicaciones para la institución.
“La ley 127-01, promulgada en el año 2001, establece claramente que el Instituto Duartiano, como entidad oficial y autónoma, está exento de tasas e impuestos nacionales. A pesar de esto, la DGII ha optado por desobedecer esta normativa, afectando seriamente nuestras operaciones”, denunció Gómez Ramírez.
Puso de manifiesto la necesidad de que cualquier reforma fiscal futura corrija las prácticas impositivas irregulares que, según sus palabras, se han instaurado en la administración pública, entre estas mencionó los “cobros concusionarios”, que incluyen el cobro de tributos no adeudados o que exceden sus montos legales.
Gómez Ramírez fue particularmente crítico con la aplicación del Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS) por la adquisición de símbolos patrios como la bandera o el escudo nacional, calificando esta situación como inexplicable e inaceptable.
“El hecho de que los ciudadanos tengan que pagar impuestos por adquirir nuestra bandera o el escudo nacional es un atentado contra el fervor y reconocimiento patrio. Este tipo de gravámenes deberían ser erradicados si queremos fomentar el respeto y el culto a los símbolos que representan nuestra nacionalidad”, afirmó Gómez Ramírez.
Por último, el presidente del Instituto Duartiano subrayó que cualquier programa de modernización fiscal debe tener en cuenta el impacto que estas decisiones puedan tener en el civismo y en el patriotismo de la población. “La reforma fiscal no solo debe buscar recaudar más dinero, sino también incentivar las demostraciones patrióticas, y eso incluye eliminar gravámenes que disuaden a los ciudadanos de rendir homenaje a la patria y sus símbolos”, concluyó Gómez Ramírez.