Santo Domingo. – La recién promulgada Ley de Alquileres de Bienes Inmuebles y Desahucios marca un cambio histórico en el mercado inmobiliario dominicano, al prohibir de forma explícita cualquier tipo de discriminación en contratos o anuncios de alquiler.
Frases como “no alquilo a extranjeros”, “sin niños” o cualquier condición basada en raza, nacionalidad, religión, orientación sexual o estado familiar quedan vetadas por esta nueva normativa, orientada a garantizar un acceso justo e igualitario a la vivienda.
La medida, que se complementa con la Ley General de Protección al Consumidor, establece sanciones para propietarios que incumplan, incluyendo la nulidad de cláusulas ilegales y posibles multas. Además, el INVI y la Procuraduría General estarán a cargo de recibir denuncias y fiscalizar el cumplimiento.
También se lanzará una campaña educativa para informar a inquilinos y arrendadores sobre sus derechos y deberes, con el objetivo de construir un mercado de alquiler más inclusivo y respetuoso de la diversidad social.