INTERNACIONAL.- Max Scherzer está emocionado de lanzar algunos balones medicinales.
Parece mundano, pero es algo que Scherzer espera con ansias cuando se reincorpore a los Rangers en Surprise durante las últimas dos semanas de los entrenamientos primaverales.
“Cuando me quitas eso durante tres meses, te das cuenta de cuánto beneficio obtienes al hacerlo”, dijo Scherzer riendo.
El 15 de diciembre, Scherzer se sometió a una cirugía en la espalda por una hernia de disco que lo dejó inactivo en ese momento de la temporada baja. Se reportó con lanzadores y receptores al comienzo del campamento, pero el jugador de 39 años estuvo en su casa en Florida con su familia durante aproximadamente dos semanas antes de regresar al club esta semana.
Scherzer no necesariamente diría que necesitaba alejarse del club, pero sí señaló que estar en casa le permitió no esforzarse demasiado ni sus capacidades competitivas al estar en plena rutina de los entrenamientos primaverales.
“Necesitaba estar en mi propio entorno, donde estaba haciendo mis propias cosas y mi propio programa de rehabilitación, y poco a poco ir paso a paso y respetar el proceso”, dijo. “Para mí, la mejor manera de hacerlo era regresar a mi casa en Florida”.
Ahora, alrededor de las 13 semanas desde la cirugía, Scherzer fue autorizado para actividades de béisbol, incluido más trabajo con balón medicinal.
«Lo más importante aquí en este momento debido a lo mucho que me han cerrado es realmente recibir algunos lanzamientos de balón [medicinal], eso era lo primero que anhelaba», reiteró Scherzer. “Eso realmente podrá aflojar todo nuevamente. Entonces puedo empezar a correr, saltar y hacer todas las cosas que, para mí, me permitan ser el mejor tipo de atleta posible.
“Luego los lanzamientos aumentan detrás de eso, así que ahí es donde estoy ahora. Todavía tengo un proceso para navegar aquí. Simplemente lo tomo día a día y escucho a mi cuerpo y lo que puede y no puede hacer”.
Mientras continúa rehabilitándose para un eventual regreso, junio sigue siendo la fecha objetivo para los Rangers, aunque Scherzer no lo ve así.
