El ministro de Relaciones Exteriores de la República Dominicana, Roberto Álvarez, advirtió ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que la situación actual en Haití constituye una amenaza directa y grave para la seguridad nacional dominicana.
Durante su intervención, Álvarez subrayó que República Dominicana, como único país que comparte frontera terrestre con Haití, enfrenta consecuencias inmediatas por la creciente ola de violencia desatada por bandas criminales en el territorio haitiano.
“La situación de Haití se ha convertido en una grave amenaza para la seguridad nacional de la República Dominicana”, declaró el canciller dominicano.
Álvarez denunció que grupos armados haitianos han manifestado intenciones de desplazarse hacia la frontera, lo que ha provocado una respuesta contundente por parte del gobierno dominicano para proteger su soberanía.
Como parte de estas medidas, se han reforzado los niveles de seguridad en puertos y otros puntos estratégicos del país, con un elevado costo económico para el Estado.
El ministro destacó además la preocupante capacidad operativa de las bandas armadas, las cuales, según afirmó, parecen estar “más organizadas y mejor armadas que la propia Policía Nacional Haitiana y la fuerza multinacional keniana” desplegada para contener la violencia.
Uno de los puntos más sensibles de su discurso fue la referencia a un reciente incidente en la localidad haitiana de Mirebalais, donde bandas criminales ocuparon la sede del consulado dominicano. Álvarez aclaró que el personal diplomático ya había sido evacuado, evitando así posibles daños humanos.
“Hace once días, estos criminales invistieron la comunidad haitiana de Mirebalais y ocuparon la sede del consulado dominicano en ese poblado. Afortunadamente, el personal que custodiaba el edificio había sido retirado previamente”, explicó.
El canciller advirtió que las amenazas de los grupos armados de avanzar hacia territorio dominicano mantienen en alerta a las autoridades, quienes han intensificado las labores de inteligencia y patrullaje en la zona fronteriza.
Por último, Álvarez expresó la profunda preocupación del gobierno dominicano ante la limitada disponibilidad de fondos internacionales para atender la crisis haitiana, lo que compromete los esfuerzos de la comunidad internacional y dificulta una respuesta eficaz a la gravedad del conflicto.
“La falta de recursos internacionales limita seriamente la capacidad de respuesta ante esta situación que amenaza no solo a la región, sino a la estabilidad del Caribe en general”, concluyó.