El Viernes Santo es una de las conmemoraciones más representativas y profundas del cristianismo en la que se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús del Nazaret en el monte del Calvario.
Este día recuerda la pasión y muerte de Jesucristo en la cruz, y forma parte del Triduo Pascual, que también incluye el Jueves Santo —día de la Última Cena— y el Sábado Santo, jornada de espera previa a la resurrección.
En la tradición católica, no se celebra misa durante el Viernes Santo, sino una liturgia especial centrada en la Pasión del Señor, con actividades como el Vía Crucis y la Adoración de la Cruz.
En el país caribeño, el día es feriado nacional, y aunque muchas personas lo dedican a la oración y la meditación, también persisten creencias populares que marcan el comportamiento de gran parte de la población.