El Consejo Presidencial de Transición de Haití (CPT) destituyó al primer ministro, Garry Conille, y nombró en su lugar al empresario Alix Didier Fils-Aime, en medio de acusaciones de corrupción, disputas sobre la legalidad del proceso y el cuestionamiento de Conille sobre la legitimidad de la decisión que, a su parecer, contradice la Constitución.
Asimismo, esta decisión del Consejo Presidencial abre un nuevo periodo de incertidumbre en el país caribeño, golpeado desde hace décadas por la violencia, la pobreza y la inestabilidad política.
El coordinador de la Mesa Nacional para las Migraciones y Refugiados, William Charpentier, expresó para Cachicha News que esta disposición agudiza más la crisis institucional y política de Haití.
“Lamentamos esa decisión y creemos que ya no habrá posibilidad de celebrar elecciones libres y democráticas en el 2025, nosotros siempre hemos dicho que el liderazgo haitiano y empresarial, nunca se ponen de acuerdo para por lo menos implementar una agenda mínima para que Haití pueda salir a camino”, manifestó Charpentier.
El experto enfatizó que lamentablemente no hay esperanzas para el pueblo haitiano que “pasan tantos trabajos, tanta miseria y el liderazgo político haitiano lo logra ponerse de acuerdo”.
Violencia en Haití
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), al menos 1.223 personas murieron y 522 resultaron heridas en Haití entre julio y septiembre de este año como consecuencia de la violencia y la lucha contra las bandas este año.
La gran mayoría de estos casos se documentaron en el área metropolitana de Puerto Príncipe, seguida de Artibonite y Grand’Anse, de acuerdo con el informe, que recordó que en el trimestre abril-junio murieron al menos 945 personas y 434 resultaron heridas a causa de la imparable violencia en este deprimido país caribeño.